Cada vez se vuelve más común el desarrollo de aplicaciones e integraciones con diferentes tipos de Inteligencias Artificiales (IAs), el consumo de productos o generación de proyectos basados en este tipo de tecnologías y la integración de diferentes elementos con IAs en los ambientes corporativos, con el fin de automatizar u optimizar procesos, sin embargo,
La tecnología está entrelazada con cada aspecto de nuestras vidas personales y profesionales, y las Amenazas Persistentes Avanzadas (APT, por sus siglas en inglés) representan uno de los mayores desafíos en ciberseguridad. A diferencia de los ataques más visibles y disruptivos, las APT operan en las sombras, infiltrándose sigilosamente en los sistemas, con objetivos estratégicos